Cita Iniciado por XxlFaculxX Ver Mensaje
PD: Algo en que aparezca una tal "Alisha"
Cita Iniciado por totho Ver Mensaje
buen relato, pero hasta yo me senti inutil :(
Te compenso toto, ahora lo acomodo.

Capítulo 2:
Rodeado, sin escapatoria, con guardias armados y sin saber que hacer ANABELLE tuvo una única idea... entregarse. Sí, le pareció descabellado en principio pero que mejor que entregarse para que cuando el mismo Lord Thek lo interrogase poder actuar. La determinación que requirió para hacerlo era mucha ya que sabía que si lo hacía iba a morir luego pero no le importaba. Nholk estaba a salvo y él podía entregarse para cumplir con su misión tranquilamente.

No puede ser, Ann está ahí adentro y yo acá sin poder hacer nada, me siento un inútil ¿pero que podría hacer alguien como yo?, no puedo defenderme solo contra tantos guardias, puedo defenderme,soy competente en combate pero sé usar magia, no podría hacer nada contra sus sacerdotes.

-¿Nholk? -una voz detrás mio llamó mi atención.
-¿Alisha?
-¿Que haces acá afuera con lo peligroso que es?
-Pregunto lo mismo
-Bueno yo soy neutral para mi es normal digamos, no me van a hacer nada en cambio vos podes morir en cualquier momento.
-Vine a ayudar a Ann y ahora no sé que le pasó que no vuelve
-¿¡Ann está acá!?- exclamó Alisha, parece que se acuerda aún de las batallas en las que estuvimos los tres juntos cuidándonos las espaldas.
-Sí, se infiltro para matar a Thek y no volvió todavía
-Esto me va a costar caro pero decime que pensas hacer...
-¿me vas a ayudar?
-Si es por Ann sí, después de todo le sigo debiendo la vida.
-Está bien, escuchame atenta que no tenemos mucho tiempo.
-Sí...

Después de escuchar mi plan Alisa y yo nos separamos, era más que obvio que tendríamos que improvisar en algún momento pero al menos tendríamos que ser capaces de llegar hasta donde estuviera Ann. Primero que nada yo corrí hacia la entrada a la ciudad e hice un gran escandalo para que los guardias estuvieran alerta, acto seguido Alisha incendió toda la parte oeste de las afueras de la ciudad. Con todos los guardias ocupados ahí pudimos entrar en la ciudad fácilmente, no me quedó otra más que entregarme a mi pero supuse que Alisha cumpliría con su parte.

-Ann, estás bien?
-Qué haces acá estúpido, te dije que te fueras...- Ann estaba muy golpeado, pareciera que lo torturaron por horas.
-No podía irme sin vos, no sería un amigo si lo hiciera.
-Acá la amistad no importa, tenes que ser inteligente y pensar en tu propia vida, por algo te dejé afuera, quería que vivas y no me estorbaras.
-Lo siento, pero acá el estúpido sos vos,
-Ya deja de hablar, tenemos que pensar como salir
-¿Y tu misión?
-Lord Thek no está en la ciudad esta noche, salió para reunirse con alguien o algo parecido, escuché a los guardias hablando de eso cuando me agarraron.
-Bueno quedate tranquilo ya pensé en eso.
-Que hiciste?
-Nada, solo espera.

Al instante apareció Alisha con las llaves de la celda para sacarnos, el problema no era entrar en la ciudad, el real problema iba a ser salir.

-¿Alisha?
-Ann, tanto tiempo.
-Ahh dios, esto es vergonzoso.
-Sí en verdad...- Alisha y Ann siempre tuvieron diferencias, pero Alisha siempre resepetó a Ann como si fuese alguien superior a ella, aunque nunca lo dejara ver, siempre fue así.
-¿Quién sigue ahora? ¿Lhiam?
-¿Quién?
-Lhiam, según viejos relatos y leyendas el fue el antiguo consejero del Rey primero, no sólo eso, llegó a ser su mano derecha. Así fue como se ganó su confianza pero lamentablemente un día cinco demonios enviados por Thek se infiltraron en el castillo de banderbill y lo asesinaron. Después de su muerte volvió como espíritu y fue nombrado Lhiam, nadie sabe como fue su nombre anteriormente, algunos comentan que Vhent fue como su madre lo llamó, pero la verdad es que nadie lo sabe con exactitud. La cuestión es que su espíritu volvió y dicen que tan noble fue su actuar mientras estuvo vivo que se volvió la mano derecha de DIOS.
-Y eso viene a?
-nada, valía la pena contarlo.
-Que manera de decir cosas inútiles para este momento
-Ya sabes como soy
-Nunca vas a cambiar tal parece
-Igual que vos nunca te cambiaste ese peinado que te deja la cara como una rodela
-Bueno chicos basta, tenemos que irnos.

Así fue que los tres salimos y apenas cruzamos las puertas de la prisión nos acorralaron 10 guardias. Luchamos incesantemente durante horas mientras más y más guardias llegaban, cada golpe, cada hechizo, cada gota de sangre derramada, cada sonido de espadas que chocaban, todo se hacía muy confuso, parecía que n podríamos salir con vida. Milagrosamente llegaron refuerzos que envió el Rey para ayudarnos.

Hasta acá otro relato, sepan disculparme pero no soy bueno escribiendo cosas medievales la verdad xD