CARLA CONTE
¿Te atreves a pararla de pechito?

Emblema de la morocha argentina, la conductora es la madrina que Olé eligió para la Selección. Ella analiza al plantel y promete más fotos si somos campeones. ¡Stamo mo-ti-va-do!





NATALIA SCALI [email protected]



Según la Real Academia, la belleza es un conjunto de cualidades cuya contemplación produce deleite. Y quién no oyó hablar de la belleza del fútbol. Por eso se venera a los Tevez, a los Messi, a los Riquelme, se aplauden los caños y los tacos. Todos estos condimentos hacen más bello al fútbol, que, dicen por ahí, es y será cosa de hombres. ¿Y ante qué belleza se rinden los hombres? Ante la de una mujer, musa inspiradora de obras maravillosas a lo largo de la historia. Ahora, como el objetivo de los chicos de Pekerman es la Copa del Mundo, hubo que pensar en la mejor musa. Por eso Carla Conte es la madrina nacional. "Es una responsabilidad y una gran emoción. Me siento muy identificada con la mujer argentina. Quizás porque soy morocha, no estoy operada, tengo celulitis, jajajaja. Soy normal, lo que ven", asegura Carla, quien recibe el cetro de quien fuera la anterior madrina, Pampita.

Alemania 2006 ya es un hecho. Y aunque Carla no es habitualmente devota del fútbol, para los mundiales saca chapa de "chica subida al paraavalancha" y se pone la celeste y blanca. "Soy de River por mi familia, pero mucha bola no le doy. Eso sí: el Mundial es otra cosa. Miro todos los partidos, me gusta festejar. Y mis recuerdos se remontan a mi época de niña: viví a pleno el Mundial 86, con Diego más iluminado que nunca. Recuerdo el festejo, con toda mi familia en la calle. Me puso muy, pero muy triste cuando nos tuvimos que volver en primera ronda de Japón. Y el que más recuerdo, porque recién empezaba el secundario, fue el de Italia", cuenta la madrina. Por un momento vuelve a transitar su adolescencia. "En el 90 nos juntábamos todos a ver los partidos, y teníamos cábalas. Como habíamos perdido la primera fecha con Camerún, había que cambiar todo. Y tengo un montón de imágenes: nos preguntábamos si en el colegio nos iban a dejar ver el partido porque era en hora de clase, salíamos a festejar, Diego estaba lesionado... Nunca me voy a olvidar del gol de Caniggia ante Brasil, y ni qué hablar del que les hizo a los italianos... ¡¡¡Siamo fuori della coppa!!!!, lloraban los tanos. Impresionante".

Un párrafo aparte merecieron los jugadores que son de la preferencia de Carla. "Diego es un jugador increíble, un grosso, siempre lo seguí. ¡Ahora hasta voy competir con él por los Martín Fierro en el rubro Revelación! Es muy raro, muy bizarro. Por ahí tengo la posibilidad de conocerlo en la entrega de premios. Se me viene a la mente el gol que gritó a cámara con la cara desfigurada o cuando puteaba a los italianos porque ellos nos insultaban el himno. Siempre se jugó por la Selección, siempre tuvo muchos huevos y eso está más que demostrado", cuenta, y confiesa que hasta lloró de emoción festejando algún gol del Diez.

Pero la madrina no se olvida de sus ahijados y tiene sus elegidos en esta Selección: "Me gusta cómo juegan Crespo, Aimar, el Pibito Saviola". Y opina sobre lo que puede llegar a pasar en Alemania. "Después de lo del Mundial pasado, los chicos van a ir con menos presión, más tranqui, muy perfil bajo. Y es bueno, a veces, ir de punto. Igual, es Argentina y siempre vamos a intentar estar ahí arriba. Y sé que los chicos van a salir a ganar con todo, por ellos y porque hay mucha gente que quiere verlos campeones. A mí que no me hablen de Brasil o Alemania. Para mí el candidato es Argentina, Argentina y Argentina. ¡¡Basta de Brasil!!", enfatiza Carla.

Al final, se hace tiempo para hablar de belleza, aunque no precisamente de jogo bonito: "Para mí, el lindo histórico de la Selección es Batistuta, y todavía no hay ninguno que ocupe su lugar. De los chicos de este equipo, el que podría tener más chances es el Pato Abbondanzieri, porque es alto, tiene buen físico y por estilo es el típico varón argentino. Pero no hay un top model como Bati", cierra el análisis. Y ojo, no anda con chiquitas a la hora de las promesas. "Si Argentina da la vuelta, vengo y hacemos otras fotos". ¿Con menos ropa? ¿Más hot? Será cuestión de salir campeones y develar el misterio. ¿Un nuevo desafío para los Pekerman''s boys? Otro motivo más para festejar el 9 de julio.

Fuente: Olé