Iniciado por
Juanchop
Creo que te saltó mucho la térmica con la palabra "ignorante". No estoy diciendo que seas un total ignorante, o un boludo, solo afirmo que parece que en este tema no sos un estudioso que digamos. De la misma manera vos me podes decir que soy un ignorante en muchos otros temas, como pueden ser la formula uno, o la literatura francesa, que se yo. Seguramente en muchos temas soy muy ignorante, y cuando me lo digas lo voy a aceptar. Pero esta cuestión no es tan simple, y aunque me da mucha fiaca (porque la experiencia me muestra que esto nunca lleva a nada, excepto alguna que otra grata excepción) voy a poner algunos argumentos básicos y simples, tratando de resumir una cuestión que muchas veces abarca libros enteros.
Para empezar, y hacerla bien simple, si aceptamos la teoría hilemórfica de Aristóteles, es decir: que todas las cosas están constituidas por dos "sustancias incompletas", partes esenciales, que se reclaman mutuamente, y son la materia y la forma; si la aceptamos, tenemos que aceptar el alma de Aristóteles. La materia constituye todo lo que es en potencia para el ser (sustancial y accidental, esto llevaría a otra distinción: materia prima y materia segunda o "sujeto"). La forma es lo que hace ser en acto a un ser, transmite el ser a la materia. Decía que a la forma substancial simple de los vivientes se le llama alma. Se podría ahora hacer la distinción aristotélica entre alma vegetal, animal y racional, pero no es importante ahora.
Es el alma lo que da al cuerpo, múltiple en sus partes y cuyas células se renuevan constantemente, la unidad en el presente y la identidad a través del tiempo que presenta el "yo" a nuestra conciencia, a pesar del cambio constante (panta rei) al que están sometidas todas las cosas materiales.
No podes rechazar el alma por el solo hecho de que no la captes por los sentidos, porque tendrías que demostrar, contra la experiencia cotidiana, que no tenemos medios de conocimiento distintos de los sentidos. Por eso no se puede recurrir a la ciencia experimental para probar la existencia del alma espiritual, porque la ciencia solo hace análisis sobre hechos captados por los sentidos.
Un ser que obra de una manera espiritual es espiritual, por lo menos parcialmente, porque se obra según lo que se es, ya que el obrar sigue al ser: es el natural despliegue del ser. El hombre obra de una manera espiritual, es capaz de operaciones intrínsecamente independientes de la materia. Estas operaciones son las propias del entendimiento (en el cual el hombre conoce las cosas inmateriales, solo aprehende de las cosas materiales los tipos de ser abstractos y universales que ellos realizan, comprende y afirma en actos lógicos, como el juicio y el raciocinio, la identidad material entre dos o más ideas o conceptos; todos estos datos inmateriales) y de la voluntad (que tiende a la felicidad y a algunos bienes inmateriales, como el deber, la ciencia, el sacrificio o la virtud, lo que supone una actividad inmaterial). Entonces el hombre es, por lo menos parcialmente, un ser espiritual.
En cuanto a la inmortalidad, te puedo dar ahora, muy cortitos, dos argumentos, pero hay más (aunque algunos dependen de presupuestos filosóficos importantes, como los de Platón, y por eso no todos son conciliables):
1- Metafísico: El alma no es corruptible porque, siendo simple, no tiene partes esenciales, y, siendo espiritual, no depende de la materia en su existencia. Lo que no es corruptible es inmortal por naturaleza.
2- Moral: La ley moral tiene que tener una sanción perfecta para ser eficaz, y en este vida no hay sanción perfecta para los actos internos, ni siquiera para los externos. Por lo tanto debe haberla en otra vida del alma, porque es este el elemento principal de la persona humana responsable. Este argumento falla en que no prueba la inmortalidad del alma, sino solo la existencia de otra vida, a no ser que se demuestre que la sanción, para ser eficaz, tiene que durar para siempre.
Este argumento es tomado por Kant para probar la existencia de Dios, al punto que lo considera el único argumento valido (después de haber negado la metafísica).
Todo esto requiere algunos presupuestos filosóficos (como el hilemorfismo aristotélico), que pueden no ser los tuyos, y eso esta perfecto. Yo solo pretendo mostrar porque la cuestión no es tan simple, y que la discusión sobre el tema no empezó con el cristianismo, sino que tiene varios cientos de años más (y no pienso empezarla acá) y es un tema clave en la antropología filosófica. Alguien que le tiene miedo a la muerte, busca simplemente evitarla a cualquier costo, no inventa una razón que lo lleve, en muchos casos, a dar la vida, abrazar el martirio por una causa, la que fuere.