ya que ultimamente se hicieron bastantes posts de politica y esas cosas les dejo un par de articulos de Andres Oppenheimer. (Andrés Oppenheimer - Wikipedia, la enciclopedia libre)

el tipo es de derecha, pero en algunos temas sociales considero que tiene una mirada muy lucida, tambien algunas de sus ideas en materia economica me parecen interesantes... sobre todo es muy bueno como redacta el tipo, habla sobre temas complejos con un lenguaje totalmente simple.

Primer articulo: una curiosidad sobre el canal de Panama, me parecio interesante que la gente de panama pueda administrar (segun dice el autor) mejor el canal, que los gringos... en general solemos tener la autoestima bastante baja en latinoamerica sobre lo que nosotros y nuestros gobiernos podemos lograr.

28/10/2006 | La lección del Canal de Panamá

Andrés Oppenheimer

El referéndum que se acaba de aprobar para expandir el Canal de Panamá deberia servir como un buen recordatorio para la nueva camada de políticos antihispanos en Estados Unidos - frecuentemente disfrazados de defensores del control inmigratorio - sobre cuán equivocados estuvieron sus predecesores en uno de los mayores debates sobre América Latina que se recuerden en Washington.

Me refiero a la confrontación que se dio en el Congreso norteamericano durante la ratificación de los tratados del Canal de Panamá de 1977, por los cuales la vía oceánica pasaría al control total de Panamá en el año 2000. Poderosos senadores y periodistas opuestos a la decisión del presidente Jimmy Carter de traspasar el control del canal adujeron que Panamá jamás sería capaz de operar eficientemente una de las vías oceánicas más grandes del mundo.

''Panamá carece totalmente de capacidad de administración'' dijo el Almirante Thomas H. Moorer, ex Jefe del Estado Mayor conjunto, a un comité del Congreso durante el proceso de ratificación en 1978. ``Es muy dudoso que pueda adquiririr la capacidad de mantener y operar eficientemente el canal...incluso después del 2000''.

''El canal no opera con buenas intenciones, sino que requiere el manejo eficiente de una compleja serie de compuertas'', dijo el senador Paul Laxalt, de Nevada, al mismo Comité. ``Panamá no tiene personas calificadas para eso''.

El senador Barry Goldwater, de Arizona, fue citado por The New York Times el 23 de febrero de 1978 diciendo que la corrupción endémica de Panamá arruinaría la administración del canal. ''Yo conozco a estos países latinos. Se muy bien cuando es perfectamente correcto mentir. En los Estados Unidos no podrían salirse con la suya con el tipo de cosas que hemos visto en muchas otras partes del mundo'', dijo Goldwater.

Sin embargo, la historia está demostrando que los opositores del Tratado no podían haber estado más equivocados.

Esta semana, tras la aprobación el domingo del referéndum para destinar $5,300 millones para la expansión del Canal, decidí averiguar cuán eficiente ha sido la administración del Canal desde que los panameños se hicieron cargo del control total de la vía oceánica el 31 de diciembre de 1999.

Virtualmente por donde se mire, la respuesta es que los panameños han manejado el Canal muy bien:

-Los ingresos del Canal de Panamá se han disparado de $769 millones en el 2000, el primer año bajo el control panameño, a $1,400 millones em el 2006, según cifras de la Autoridad del Canal de Panamá.

- El tráfico a través del Canal se incrementó de 230 millones de toneladas en el 2000 a cerca de 300 millones de toneladas en el 2006.

-El número de accidentes ha descendido de un promedio de 28 por año al final de los años noventa, a 12 accidentes en el 2005.

-El tiempo de tránsito promedio a través del Canal es de cerca de 30 horas, casi lo mismo que al final de los noventa, a pesar de que están cruzando barcos más grandes.

-Los gastos del Canal se han incrementado mucho menos que los ingresos en los últimos seis años, de $427 millones en el 2000 a $497 millones en el 2006. ''Todos los indicadores son positivos'', me dijo el jefe de la Autoridad del Canal de Panamá, Alberto Alemán Zubieta, en una entrevista esta semana. ``Al contrario de lo que decían quienes afirmaban que Panamá sería incapaz de operar de las rutas más grandes del comercio mundial, se ha demostrado lo contrario: se ha administrado no sólo bien, sino mejor que cuando estaba bajo el control de los Estados Unidos''.

Linda Watt, la ex embajadora de Estados Unidos en Panamá entre el 2002 y el 2005, está de acuerdo. En una entrevista telefónica, me dijo que la operación del Canal en manos panameñas ha sido ''sobresaliente''. Agregó: ``La comunidad carguera internacional está muy satisfecha''.

Algunos de los actuales campeones del aislacionismo en Estados Unidos - como Lou Dobbs de CNN y el recurrente candidato presidencial Pat Buchanan - han puesto el grito en el cielo por el hecho de que una empresa de Hong Kong, Hutchinson Whampoa Ltd., esté operando dos de los seis puertos de Panamá.

Panamá dice que es una operación puramente comercial. El embajador de los Estados Unidos en Panamá, William Eaton, fue citado por The Associated Press esta semana diciendo que los intereses de China en el Canal son ``puramente económicos''.

Mi opinión: Latinoamérica podrá tener toda clase de problemas, pero lo cierto es que la historia demuestra que los aislacionistas norteamericanos están frecuentemente más influenciados por sus prejuicios antihispanos que por la realidad.

En lugar de construir muros para separar más a los Estados Unidos de América Latina, Washington debería seguir el ejemplo europeo y construir puentes con la región. Tal como lo demuestra la historia del traspaso del Canal de Panamá, los aislacionistas norteamericanos se equivocaron en grande.


Segundo articulo: sobre mexico y los carteles de la droga.

22/03/2009 | Estados Unidos y la violencia fronteriza

Andrés Oppenheimer

Cuando la Secretaria de Estado Hillary Clinton vaya a México esta semana para tratar el tema de la violencia de los carteles de la droga que ha causado 6,200 muertes el año pasado y que se esta extendiendo a través de la frontera con Estados Unidos, debería escuchar un mensaje muy claro: Detengan el tráfico de armas estadounidenses que está aumentando el derramamiento de sangre.

Clinton tiene previsto viajar a México el 25 de marzo, en medio de una ola de críticas a México de comentaristas desaforados en la televisión por cable estadounidense --sí, estoy hablando de Lou Dobbs, de CNN, y de Bill O'Reilly y Glenn Beck, de Fox News--, quienes presentan la violencia fronteriza como si fuera un problema exclusivamente mexicano, y no tuviera nada que ver con el voraz consumo de drogas y la facilidad de comprar armas en Estados Unidos.

Los carteles de drogas en México generan entre $17 y $38.3 mil millones anuales como producto de sus ventas de cocaína, heroína y marihuana en Estados Unidos, según el Centro Nacional de Inteligencia sobre Drogas del Gobierno estadounidense. Y los carteles consiguen más del 90 por ciento de sus armas en Estados Unidos, según funcionarios estadounidenses y mexicanos.

Lo que es peor, los carteles de drogas mexicanos están comprando armas cada vez más poderosas, de tipo militar, como rifles semiautomáticos Colt AR-15 y AK-47.

''Las armas de fuego obtenidas en Estados Unidos contribuyen a exacerbar la narcoviolencia en México'', dijo Kristen Rand, del Centro de Políticas sobre la Violencia, un grupo que defiende el control de armas, durante un panel realizado en el Congreso la semana pasada. ``También es evidente que las armas de fuego de tipo militar, tanto importadas como domésticas, son las preferidas de los carteles''.

En otras palabras, Estados Unidos está permitiendo el abastecimiento de armas de guerra a los carteles mexicanos.

Entonces, ¿qué habría que hacer?, pregunté a Rand después de la sesión parlamentaria. Estas son algunas de sus sugerencias:

• Frenar las importaciones estadounidenses de armas como los rifles AK-47 de los países de Europa del Este, muchas de las cuales terminan en manos de los carteles mexicanos. Según los críticos, el Gobierno de George W. Bush no aplicó plenamente una prohibición de importación de armas de combate aprobada en 1989, permitiendo así que un número importante de esas armas termine en las tiendas de armas estadounidenses.

''Desafortunadamente, la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) ha permitido que esa prohibición no rija, e incluso ha contribuido a crear lagunas legales para burlarla, como permitir que los importadores entren al país armas en partes, y las ensamblen aquí'', dijo Rand.

• Aprobar leyes que prohiban la producción doméstica de armas de combate tales como los rifles tipo AR 15. Una ley de 1994 está siendo burlada mediante sutilezas legales, como la producción de armas parecidas, con cambios cosméticos.

• Prohibir las ventas de armas de combate en las ferias de ventas da armas. Aunque los dueños de tiendas de armas deben tener licencias federales que les exigen hacer chequeos sobre los antecedentes de sus potenciales clientes, cualquier persona que venda un armas en estas ferias en la mayoría de los estados lo puede hacer sin una licencia federal, y por lo tanto sin averiguar el pasado de sus clientes.

¿Por qué nadie acaba con semejante locura?, le pregunté a Rand.

''Porque cabilderos de la industria de las armas no lo permiten'', me dijo. ``La ATF, los miembros del Congreso, todo el gobierno federal son rehenes de su grupo de presión, cuyos seguidores son tan vociferantes y persistentes que cualquier pequeña mejora de la ley es calificada como un ataque al derecho constitucional de tener armas''.

Cuando le pregunté sobre las críticas de Rand, una vocero del Departamento de Justicia me señalo por e-mail: ``ATF hace cumplir las leyes federales sobre armas de fuego, incluyendo la prohibición de importaciones''.

Mi opinión: El gobierno de Obama, que parece más consciente que su predecesor de la necesidad de acabar con las ventas de armas de combate, debería aplicar más rigurosamente las prohibiciones a la importación, y apoyar nuevas leyes que frenen la producción de armas de combate.

Pero, más que nada, Obama debería cambiar el énfasis de la ''guerra contra las drogas'' de Estados Unidos. En vez de concentrarse en la interdicción de drogas, como ha sido el caso en las últimas décadas, Estados Unidos debería dedicar más recursos a la prevención de la drogadicción y al tratamiento de drogadictos en su propio territorio.

Clinton debería regresar de México más convencida que nunca de que, si no se disminuye el consumo de drogas y el contrabando de armas de Estados Unidos, el narcotráfico seguirá creciendo, como así también la violencia en la frontera.

Miami Herald (Estados Unidos)


lei articulos del tipo sobre la Argentina pero no me parecieron buenos, por eso no puse.