La brillante ley impulsada por el oficialismo francés entra en funcionamiento a partir de esta semana. Partidarios del macrismo analizan una propuesta similar para instalar en Argentina.

Tiemblan los cyber-terroristas franceses; con la entrada en vigencia de la Ley Hadopi comienzan a regularse las transferencias ilegales de archivos entre los internautas galos. De esta forma se busca disminuir el índice de crímenes informáticos relacionados con la violación del copyright y la instalación de regímenes electrocomunistas en el espacio cibernético.



La ley propone castigar a aquellos usuarios que descarguen contenidos protegidos por derechos de autor de Internet aplicando una serie de sanciones graduales, en función de la gravedad del delito y la cantidad de reincidencias. La aplicación de los castigos cuenta, por un lado, con aquellos que generan contenidos y registran las direcciones IP de quienes los descargan ilegalmente, y por el otro a los proveedores de acceso a Internet (ISP), que deberán notificar en un plazo máximo de ocho días los nombres, apellidos, domicilios y números telefónicos de los delincuentes. Los reincidentes sufrirán el cese del servicio de Internet, TV por cable y telefóno, y quienes aún así continuen con sus prácticas delictivas enfrentarán cargos penales.

“Los castigos deberían ser más duros”, opina Alejandro Erregebehere, productor musical. “Es intolerable que un grupo de adolescentes con ideas socialistas y subversivas compartan contenidos y saboteen a la industria. Cada uno debe comprar su copia individual, así es como está pensado el sistema, más allá de lo que el régimen montonero de los Kirchner propongan. Sitios como Taringa! deberían desaparecer de inmediato.”

En Argentina los principales conflictos con discográficas y productoras de cine radican en sitios como el mencionado por Erregebehere, que proporciona enlaces a descargas directas de contenidos con copyright. La modalidad alternativa reside en las llamadas ‘redes p2p’, donde bajo una organización anárquica los cyber-criminales buscan y transfieren música y películas de una PC a la PC. Las tendencias comunistas de estos tendidos delictivos se evidencia en la nomenclatura de la misma: p2p hace referencia a peer-to-peer, que podría interpretarse como ‘camarada a camarada’.

“Deberían ir todos presos, clausurar Taringa!, BTArg, aRGENTeaM y todos esos sitios que fomentan el robo que, en definitiva, sólo daña a los artistas. Desde nuestra productora aplaudimos de pie la valentía del presidente Nicolás Sarkozy al hacer prevalecer la justicia por sobre el delito”, finaliza Erregebehere.

Fuente:
Ley contra la piratería, otro triunfo de Sarkozy | Hasta Cuando Noticias