Después de tres años al frente del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Mauricio Macri reconoció ante los Estados Unidos que su gestión no le había ganado muchos votantes a nivel nacional y pidió que la embajada norteamericana criticara con dureza al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner.

“Si recibo apoyo político afuera de Buenos Aires, en el 90 por ciento de los casos es por haber conducido a Boca y el 10 por ciento por ser jefe de Gobierno de Buenos Aires”, dijo Macri en febrero del año pasado durante un almuerzo con la embajadora estadounidense Vilma Socorro Martínez en la residencia diplomática. El relato consta en un cable filtrado por Wikileaks y cedido a Página/12.

Página/12 :: El país :: Un socorro pedido a Vilma Socorro Martínez