Al menos por lo que veo yo, lamentablemente, creo que te equivocás. Obviamente que está lejos de convertirse en un referente político fuera de Capital, al igual que el PRO, pero cada vez, de a poquito, veo gente que se inclina hacia ellos. Ojo, todavía es muy chiquito fuera de Capital, pero recién están empezando a expandirse. Y creo que uno de los principales motivos de esto, es que mucha gente piensa que: éxito a nivel empresarial = éxito a nivel político. Eso sin mencionar que ni se preguntan sobre cómo su familia y él, llegaron a tener tal éxito a nivel empresarial.
Al márgen, hay una cosa en la que me extraña que no estemos todos de acuerdo: primero, los argentinos, después los de afuera. Es ELEMENTAL.
Y sobre la discusión en general, es mas de lo mismo. Ninguna sería una solución de fondo, solamente temporales, amén de tantas otras consecuencias que pueden llegar a traer esas supuestas soluciones.
Yo mantengo mi opinión anterior: hay que empezar a proyectar. Estas cosas son solucionables (REALMENTE SOLUCIONABLES) sólo en el mediano y largo plazo (mas largo que mediano). Acá lo único que se hace desde siempre, es emparchar, nunca nadie se dedica a ir al fondo de los problemas. Probablemente no se puedan proyectar todas las cosas al mismo tiempo, pero de alguno de los pilares para un Estado y sociedad mas equitativos, hay que empezar. Lo principal SIEMPRE va a ser la economía, sin plata no puede haber ninguna de las demás cosas.
Hay que ¿re?capitalizar el país. Fomentar inversiones, especialmente en industria, tratar de reflotar la industria nacional, fomentar el desarrolo de cooperativas, regular MEJOR el aspecto impositivo, dar competitividad a los productos nacionales en lugar de regalarle el mercado a los extranjeros. Yo digo sólo lo que se me viene a la cabeza en éste momento, está de mas decir que no soy experto en economía y mercado, creo que se bastante poco sobre esas cosas, pero me parece que hay cosas de las que hasta el más tonto se puede dar cuenta.
Y una vez que haya plata, se puede hacer TODO lo demás. Desde invertir en educación y cultura, hasta obras de infraestructura de todo tipo (ferrocarriles, puertos, rutas, etc.). Una vez hecho eso, seguramente la mayoría de los argentinos tendrán una vida mucho mas digna, partiendo desde el trabajo y la educación. Probablemente muchas generaciones ya se puedan dar por "perdidas" en el aspecto educacional, pero el futuro para las siguientes podría ser muy distinto. Y ahí bien, solucionados estos problemas de los argentinos, que se repartan permisos de trabajo al que quiera venir a laburar al país y, a la larga, se les dará la posibilidad de obtener una ciudadanía y vivir como cualquier argentino.
Todos sabemos que Argentina es un país que tiene la posibilidad de hacer todo esto y mucho más, pero la clase política que tenemos, mientras siga siendo la misma (aunque cambien nombres, hace rato que es la MISMA), viene impidiéndolo hace rato y las cosas van a seguir pasando como hasta ahora.
Y no estoy de acuerdo con los que dicen que tenemos los gobernantes que nos merecemos, creo que tenemos los que podemos tener. Yo no elijo candidatos, yo no formo a la gente que el día de mañana va a decidir mi futuro. Yo me encuentro limitado a elegir entre las opciones que me dan y, lamentablemente, el resultado sigue siendo siempre el mismo: yo tratando de votar al que me parece el menos peor entre los que tienen alguna posibilidad en cada elección. Me dirán que afiliándome a un partido, tengo la posibilidad de empezar antes con el proceso, desde hacer campaña para quien considere el mejor futuro candidato para "X" cargo, hasta poner mi granito de arena en elecciones internas, pero por mas que a muchos les pese, terminás encontrándote con lo mismo. Incluso hasta son capaces, en caso de que no gane las internas tu candidato, de expulsarte del partido por negarte a apoyar al ganador de las internas si no te gusta. Cada uno tiene sus intereses y los intereses de quienes los apoyan a saber, en orden de importancia para ellos: Partido --> empresarios --> pueblo (pudiendo cambiarse el órden, ocasionalmente, entre los dos primeros). Y ni hablar del votante promedio, que no tiene idea de quien es cada candidato, mas allá de los cientos o miles discursos de campaña. No tenemos la posibilidad de saber REALMENTE a quien carajo votamos porque:
A - Basarse en el discurso, no es suficiente. Estamos acostumbrados a que en el discurso digan "A" y una vez en el cargo hagan "Z", o directamente ni hagan.
B - Los antecedentes políticos de cada uno, siempre van a ser subjetivos según quien te los de a conocer. A menos que seas omniprescente y hayas podido experimentar los mandatos anteriores de cada uno en carne propia, en el cargo que sea que hayan tenido. Y a eso le podemos agregar las estadísticas, que cada día son mas engañosas en Argentina (y no hago referencia al IndeK unicamente)
Estos son algunos de los motivos por los que no creo en la supuesta militancia de la que algunos hacen alarde y te muestran como el camino para producir algún cambio y construir desde adentro en lugar de quejarte "sentado cómodamente frente a tu PC" y no hacer nada para cambiar las cosas. En cambio, estos "militantes" en su gran mayoría, si su candidato pierde las internas, se ven forzados por el motivo que sea, a apoyar al candidato ganador "en nombre de las ideas (¿?) que defiende el patido".
Por todo esto, yo sigo pensando que las ideologías son un cuento que se creen algunos, cuando lo único que hacen a la larga es ponerse detrás de una bandera política (no ideológica, mentirosos) y seguir los LINEAMIENTOS de las cabezas del partido al que pertenecen.
Para terminar, creo que me encuentro limitado a seguir votando a quien me parezca el menos malo (jamás en blanco, por si se preguntaban), esperar los resultados electorales y, gane quien gane, encontrarme con la grata sorpresa de que, ¡POR FIN!, nos encontramos frente a un gobernante que dijo "A" durante la campaña y efectivamente hizo "A", o a lo sumo "B" o "C" durante su mandato y con una oposición que no se dedique solo a obstaculizar los intentos de hacer "A" de ese gobernante. Y, en caso de que lo haga, los esfuerzos de dicha oposición sean infructuosos.
Que lindo sería...que lindo.
Mientras tanto, creo que seguimos estancados en un círculo vicioso del que no veo salida en mucho tiempo.