El principal escollo del sector es la falta de crédito bancario. En un relevamiento realizado por Cash se observa que el Gobierno destinó más de 21 mil millones de pesos en distintas formas de financiamiento y acceso a préstamos.
“La sustentabilidad de las variables macroeconómicas, el fortalecimiento del mercado interno, el fomento del consumo, en el marco de un modelo que generó 5 millones de puestos de trabajo, las moratorias impositivas que desendeudaron al sector y la defensa de la industria nacional de la competencia desleal permitieron reindustrializar al país y proyectar nuestras pymes a la exportación”, señaló a Cash la ministra de Industria, Débora Giorgi. No existen antecedentes de un proceso de expansión de la magnitud que viven actualmente las pymes. En los últimos años se crearon 140 mil empresas y 2400 exportadoras, lo que equivale a un crecimiento del 71 por ciento respecto de 2003.
Hubo bancos que encararon otra lógica de negocios. Es el caso del Nación. La entidad que conduce Juan Carlos Fábrega incrementó la participación de préstamos a pymes de 8 por ciento en 2003 a un 52 por ciento. Lo que para los bancos extranjeros significaba un riesgo, para el Nación fue un cambio notable. Entre 1990 y 2003 llegó a perder 1540 millones de pesos. Desde 2004 registró ganancias todos los años. En 2010 informó un resultado positivo de 2333 millones de pesos. Esta mejora la obtuvo atendiendo a las pymes, mientras que la morosidad que muestra el banco se ubica por debajo de todo el sistema. El producto estrella del Nación es la Línea 400, que bonifica la Secretaría de la Pequeña y Mediana Empresa (Sepyme), permitiendo a las pymes acceder a préstamos con una tasa de interés de 9,5 a 11 por ciento. Los créditos están destinados a industria, construcción, transporte, servicios sociales y de salud, informáticos, investigación y desarrollo.
El resto de los bancos comenzó tímidamente a ofrecer líneas propias. Mientras el financiamiento bancario se incrementó en un 289,3 por ciento hasta llegar a los 122.000 millones de pesos entre 2003 y 2010, el destinado específicamente a las pymes subió un 465,7 por ciento. En el último año, el empresariado pyme encontró en el sistema bancario 44.000 millones de pesos. El BCRA incorporó en su página web un link de consulta para que las pymes se informen sobre las distintas alternativas de los bancos.
El menú se completa con otros programas: sectoriales, de renovación de flota del transporte de carga, a jóvenes emprendedores, de desarrollo de parques industriales públicos y sistema de Sociedades de Garantía Recíproca. Este último tiene como fin facilitar a las pymes el acceso al crédito mediante la emisión de garantías para el respaldo de sus obligaciones, de forma tal de lograr acceso al financiamiento y/o mejora en los costos de dicho financiamiento. Se complementan también otros actores públicos, además del Banco Nación, el BICE y el Ministerio de Agricultura. A todo esto
se suma el Programa del Financiamiento Productivo del Bicentenario, donde el 60 por ciento de las empresas que accedieron fueron pymes, por 856 millones de pesos desde su implementación el año pasado. Estos créditos se canalizan, con redescuentos del Banco Central, a través de bancos públicos y privados.