“GRACIAS A MI EX”


Escapo, intentando olvidarte del todo. Me voy lejos de acá, tanto como pueda, pero no puedo escaparme de mis pensamientos. Concejos de amigos, otras, alcohol, probé de todo, pero de nada sirve.
Y tu recuerdo golpea y me duele. Siempre ahí, en mi costado izquierdo, ahí donde esta mi corazón.
En esos momentos de dolor, recuerdo los días en que vos y yo éramos, o intentábamos ser, felices. Una felicidad, que a comparación con la vida, duro solo un instante, pero que recordaremos hasta que nuestros corazones diga basta. Un día dijimos terminemos todo, y creímos que así fue. Pues nuestros recuerdos nos atormentan por siempre. Esas noches de lluvia, esos atardeceres bellísimos, los cuales compartía con vos, no serán lo mismo, porque la lluvia estará mas fría, el sol no brillará como lo hacía siempre, solo porque no estas a mi lado.


Y llegué. Estoy al borde del precipicio. No veo el fondo, pero sé que no puede ser peor de lo que estoy viviendo.
Pero pienso; ¿qué será de mis amigos, mi familia, mis hermanas?
Quizás mis hermanas crezcan sin verme los días y las noches, habrá una silla vacía en la mesa, la cual verán con melancolía y talvez alguna lagrima.
Sobrará un lugar en el auto repleto de mis amigos, que van al boliche. Sobrará cerveza y habrá un poco más silencio a la hora de dormir. Por ahí alguno de ellos me recuerde con un poco de cerveza y alguna, infaltable, anécdota.
Mi familia tendrá mucho dolor, pero tendrá que aprender a vivir con ello. Sobraran las fotos, correrán las lágrimas, pero nada más. Buscarán razones y pensarán las opciones que tendría que haber considerado. Pero que sé yo. Sigo ahí, conde el viento sopla desde abajo.
Pasan los minutos y pienso... “QUE MÁS DÁ”... y doy el paso.
Antes del fondo, digo para ese lugar donde se quedara mi vida;

QUE PODRIA SER PEOR.