Según informan las cadenas árabes, hace poco más de una hora fue asesinado, si me permiten la expresión, el ex presidente iraquí Saddam Hussein.

Personalmente, me opongo a la pena de muerte, pero ese es un debate que ya se ha dado y creo no va al caso reiterar.
Lo que me parece espeluznante es el turbio y circense proceso que determinó la suerte de Saddam. Proceso llevado a cabo bajo el estricto padrinazgo de "la policia del mundo" quienes se encargaron de entrar a un país con petroleo y un régimen duro y violento, y dejarlo en un estado aún más violento tras darle el poder a aquellos que buscaban vengarse del ex presidente por losvejamenes sufridos.

Una muestra más de que los DDHH cada vez más parecen una novela de ciencia ficción.

Hoy, el angel rojo, no lleva su banda negra por mi ban, sino por la muerte de un hombre que, justo o no, se convirtió en un ejemplo de como no se puede confiar a la justicia la vida de un ser humano.