El mejor juego "outdoor" de la la infancia fue el que hacíamos con los pibes usando un simple Rulero y un Globo, la idea consistía en combinar ambos y hacer una especie de mini catapulta, un arma individual, en la que uno podía arrojar cualquier tipo de objeto que entrara (bolitas, piedras, o frutos de yuyos), nos llenabamos los bolsillos de alguno de ellos y en media Plaza San Pedro se armaban las batallas, era un completo caos, terminabamos con moretones por todo el cuerpo.

La "inconciencia infantil" es lo que hace a esa clase de juegos algo realmente divertido.

Otros juegos buenos eran la escondida de noche, competir a ver quien daba mas vueltas manzanas en bici matando a toda vieja que habia por el camino, jugar a las bombitas en verano (cuantos fuimos los que de chico tocaron su primer culito femenino haciendo esto...), a las bolitas en la vereda, y tantas otras clases de boludeo infantil.